La mayoría de las personas solemos juzgar a los demás sin saber en realidad las circunstancias por las que están pasando y damos por hecho que las actitudes son directas hacia nosotros, lo cual nos hace pasar a veces malos ratos.
Sin lugar a dudas lo ideal sería preguntar que sucede, pero ya nuestra mente se encargó de decirnos con lujo de detalle una mala interpretación.
En mi caso pasé varios días en la depre por algo que supuse y me causaba una gran incomodidad, malinterpreté un comentario y en lugar de aclararlo, solo suponía el por qué, y cada suposición me hacía sentir peor.
Hasta que esa persona decidió preguntarme por qué estaba tan distante. Al momento en que le comenté todo lo que había pensado y ella aclararme el porqué de su comentario caímos en cuenta que cada una estaba en emociones distintas, ella lo dijo sin pensar y yo lo tomé a manera personal.
A partir de entonces adopté lo que leí alguna vez en un libro:
No des nada por supuesto
Si tienes duda, aclárala
Si sospechas, pregunta
Suponer te hace inventar historias
Increíbles que solo envenenan tu alma y
Que no tienen fundamento.
C. de Espíritu libre
*Los cuatro acuerdos de Miguel Ruiz.
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